Archivo por días: diciembre 23, 2007

«Te amo»


hada_noche.jpg

Lo digo con emoción y una inmensa alegría.

Me inclino, a través de estas palabras, para rendir tributo a la luz que fluye desde tu bello corazón.

Vengo a celebrar la fortaleza y la entrega de tu espíritu.

Cada una de estas letras acariciará tu alma en señal de agradecimiento.

No fue un año sencillo, las pruebas fueron rigurosas. Pese a todo, tu llama interna alumbró con hidalguía.

Es por eso que traigo envuelto en el amor de este mensaje, mi sentir más genuino: «Te amo».

¿Acaso no lo sabías?

Te amo por Ser. Te amo por estar. Te amo por hacerme sentir acompañado. Te amo por ayudarme a despertar. Te amo por incentivar mis pasos.

Te amo por mostrarte predispuesto a jugar, mientras recordamos nuestra esencia divina. Te amo por tener la valentía de iluminar sin descanso. Te amo al reconocer que me amo, porque somos y seremos Uno.

Los campos de conciencia que ayudamos a cultivar están floreciendo.

Es tiempo de festejar. Muy pronto, un aroma fresco y puro comenzará a rociar el aire con vibraciones sutiles, repletas de color, magia y encanto. Ningún corazón podrá resistir tanta belleza. La luz traerá una profunda calma y felicidad.

Terminará un largo ciclo de angustia y sufrimiento.

Ese será un gran día. No existirá represa capaz de frenar el agua celestial del río de la conciencia. Las almas saciarán su sed. Habrá amor en las miradas y paz en los corazones.

La humanidad se fusionará en una vibración de hermandad que disipará toda frontera. Durante algunos instantes, nadie podrá comprender cómo fuimos capaces de vivir en la enajenación de la inconsciencia, privándonos de una energía tan armónica y sublime.

Mientras ese grandioso momento se aproxima, aún queda tarea por concluir. No te imaginás cuánto disfruto al divisar el deslumbrante futuro que nos aguarda.

Tras un intenso peregrinar, colmado de enseñanzas transformadoras que impulsaron nuestro vuelo, nos volveremos a abrazar en la unidad del espíritu. La emoción será indescriptible. Sólo podré decirte, de corazón a corazón: »
Te amo, te amo, te amo».

(Por Julio Andrés Pagano)

Visitá: http://www.proyecto-despertar.com.ar

 

Animales sagrados


 

mapuche.jpg

El hermano Edgardo Curaqueo habló respecto de los animales que tienen un importante valor simbólico para la cultura Mapuche, dado que son considerados sagrados por nuestra tradición. Muchos de ellos aparecen repetidamente en forma de dibujos adornando ponchos, matras y otras artesanías ancestrales.Curaqueo es miembro de la comunidad mapuche urbana Monguell Mammuell y realizó la descripción de los animales durante los actos realizados en conmemoración de un nuevo 11 de Octubre “último día de libertad de los pueblos originarios de América”.
En la oportunidad un grupo de jóvenes de la Escuela de Secundaria de Formación Agraria de Viedma (ESFA), realizaron algunos cuadros con la figura de tres animales; sapo, serpiente de dos cabezas y ñandú.

PIC_0095.JPGSapo: Es uno de los animales sagrados de la cultura Mapuche, dado que es el encargado de purificar el agua. Según comentaron nuestros abuelos, el sapo cumple la función de comerse todos los insectos que posee el agua. De esta manera limpia las lagunas y charcos de todas aquellos bichitos que puedan provocar algún daño al hombre. Por este motivo el sapo es considerado un animal sagrado, estrechamente relacionado con el agua; elemento fundamental para la vida. El animal llega junto con la lluvia.PIC_0093.JPGSerpiente de dos cabezas: También considerado animal sagrado por la cultura mapuche, dado que posee un newuen muy particular y poderoso. El nuewuen para la tradición mapuche, en el lenguaje del mapuzungñun, es traducido al castellano como “fuerza”. De esto, se entiende que la serpiente de dos cabezas brinda al mapuche mucho newuen, “mucha fuerza”. Es el animal sagrado que brinda fuerza, según la cultura mapuche.

PIC_0100.JPGÑandú: Traducido al mapuzungún como “Coike”, el ñandú es uno de los animales más importantes de la cultura mapuche y símbolo del pueblo. En su danza de las madrugadas, donde los ñandúes más jóvenes bailan formando círculos mientras los ancianos permanecen sentados, se inspiró el denominado “Coike Purrún”.El “Coike Purrún”, danza sagrada del pueblo Mapuche, que es traducido al castellano como “La Danza del Ñandú”.

Fuente: www.lofdigital.org.ar

A nuestros viejos…


ecos_doragil.jpg

 

                                   Edad del camino de regreso…

miradas que llenaron una vida

recuerdos de un ayer, hoy madurez

vivencias de una vida compartida.

Vaivén del recuerdo y la esperanza

dejando atrás los desvelos y la prisa

crepúsculo de paz, alma serena

llegada a la estación de la ternura.

Ser viejo es tener conocimientos

y sentarse a contemplar como es la prisa

no le asusta el carruaje de la muerte

sino cierta soledad no compartida.

Ser viejo es saber llegar al otoño

teniendo sabor a fruta madura

poseer belleza interna sin espejo

del amor, de paciencia, de dulzura.

Ser viejo es sentir que ya anochece

guardando el resplandor tras la cortina

dándose descanso al alma

por su cosecha cumplida.

Escrito por: Jacinto Herreras Martín

Rudolph, nos cuenta un cuento


nav85.gif

 

La escarcha del Lago de Cristal se resquebrajó en el centro y de repente miles de fragmentos de hielo saltaron por todos lados centelleando bajo los rayos del Sol y formando una red de centelleos entre las facetas de los cristales de hielo. En mitad de aquella lluvia de color el Hada del Agua emergió del agua helada rodeada de un destello Aguamarina.

Los animales del lago, agradecidos por haberles librado de su prisión de hielo, le felicitaron la Navidad.
– ¡La Navidad! – exclamó ella llevándose las manos a la cabeza – ¡He estado tan ocupada haciendo nieve con el Hada del Frío que ni me he acordado.! –

Y salió volando hacia el cielo dejando un reguero de gotas de rocío que formaron un Arco Iris tras ella.  

Cuando llegó al Arbol de los Deseos, hogar de todas las Hadas de Fantasía, este le felicitó la Navidad y abrió su boca para que ella pudiese entrar. Dentro todo era algarabía, el Hada Flora había prestado su gorro en forma de árbol para adornarlo y tras un toque de varita el sombrero alcanzó 2 metros. Era un abeto soberbio y de inmediato empezó a llenarse con adornos. El Hada de la Luz sacudió un poco la Estrella Polar y con el polvo de estrella que cayó espolvoreó el abeto de forma que empezó a resplandecer. Entre tanto Flora iba colgando frutas escarchadas de las puntas de las ramas mientras que el Hada del Fuego colgaba guirnaldas de velitas encendidas que se reflejaban en el polvo de estrella.

El Hada del Agua también quería ayudar así que sacudió sus alas y el abeto se llenó de gotas de rocío, pero con el calor de las velas se empezó a evaporar. Por suerte estaba allí Nieve, el Hada del Frío que con un soplido congeló las gotas de rocío de forma que ahora parecía que el árbol estaba adornado con perlas.

Cuando terminaron en el interior salieron al exterior y se dispusieron a adornar al Árbol de los Deseos. No pusieron tantos adornos, ya que el Árbol de los Deseos era un venerable anciano y debía guardar la compostura, pero sí los suficientes como para darle un aspecto de alegría.

Después cada una salió corriendo a felicitar la Navidad a todo el mundo. El Hada del Fuego fue casa por casa y chimenea por chimenea felicitando a los habitantes que en ellas viven: las Llamas. Estos pequeños y juguetones seres saltarines recibieron con mucha alegría las felicitaciones y daban salto y hacían cabriolas en sus chimeneas.

El Hada del Frío se fue a los Parajes Siemprehelados a felicitar a los Hombres de Nieve, seres formados por enormes bolas de nieve redonda y que tienen una zanahoria por nariz. Cuando llegó estaban enzarzados en una divertida guerra de bolas de nieve. Es curioso como para evitar que les alcance una bola de nieve ( y queden eliminados) se dividen en tres bolas de nieve de diferente tamaño y empiezan a rodar por el suelo. El problema es que a veces cada bola se va por su lado y a veces les cuesta un poco encontrarse.

Flora fue a ver a todos los árboles del bosque para felicitarles las fiestas, y cuando terminó se fue al Prado del Color y visitó a cada una de las flores que en ese momento, por ser invierno se encontraban en sus casas bajo tierra a la espera de que llega se el Hada Primavera y les dijese que ya podían salir.

El Hada de los Sueños entró en los sueños de todos los niños del mundo y les contó los más deliciosos sueños que podáis imaginar. 

Todo el mundo era feliz porque era Navidad en Fantasía. ¿Todo el mundo? No. Había alguien a quien todo eso le aburría. Alguien de corazón frío: Invierno. De las cuatro estaciones Invierno era sin duda la que peor llevaba su trabajo. Después de todo siempre era lo mismo, todo era gris, aburrido y monótono. Envidiaba a sus otros compañeros. Deseaba la algaraza de Verano, cuya aparición significaba el comienzo de la diversión. Se moría de envidia cuando veía a Primavera dar vida a los seres vivos, sobre todo cuando él pensaba que sólo podía matar y dormir a los animales y plantas. Por otro lado Otoño era demasiado melancólico e Invierno no podía soportar que Otoño fuese la estación más romántica.

  Ese día Invierno estaba especialmente harto de todo. Tanto que decidió irse y le dijo a sus compañeros:
– Haced lo que queráis con mi estación, yo ya estoy aburrido. –

Y dicho esto se fue a pasear por la Constelación del Cisne.

Las otras estaciones comenzaron a discutir acaloradamente. No se ponían de acuerdo en quién debería ser el que suplantase a Invierno. Finalmente, después de mucho discutir decidieron que lo mejor sería que se turnasen, que cada día se encargase uno. Lo echaron a suertes y le tocó empezar al Verano. 

Al día siguiente salió un Sol espléndido y abrasador. Hacía tanto calor que todo el mundo tuvo que apagar los fuegos y quitarse las bufandas. Aquello supuso un desastre para las Llamas, quienes se vieron sin hogar en unas fechas que siempre habían sido buenas. Además como todo estaba mojado no podían irse a ningún otro lugar.

Pero lo peor fue cuando el calor empezó a fundir la nieve. Los Hombres de Nieve no sabían que hacer porque si aquellos seguí así acabarían derretidos. Aquello les había cogido por sorpresa y no les daba tiempo de llegar hasta las Montañas Eternas, donde solían pasar la temporada cálida ya que allí siempre hacía frío. Nieve, el Hada del Frío tuvo que hacer grandes esfuerzos para mantener al los Hombres de Nieve con vida.

Cuando todo el mundo estaba desorientado con aquel cambio le tocó el turno a Primavera. Primavera recorrió los bosques y las praderas despertando a las flores y las hojas. Pero las pobres flores al salir y encontrarse rodeadas de nieve se empezaron a helar de frío, Flora no sabía que hacer para remediarlo. Pero el colmo fue cuando Otoño llegó e hizo caer las hojas de los árboles. La caída de la hoja es un duro golpe que los árboles encajan todos los años, y no se habían acabado de reponer de el de ese año cuando se les volvieron a caer las hojas. Todo el bosque estaba triste.

Esa noche las Hadas se reunieron en consejo de emergencia. Había que hacer algo o de lo contrario ese año las Navidades serían un desastre. Decidieron que fuese Rocío, el Hada del Agua la que fuese a hablar con las estaciones para averiguar lo que estaba pasando.

Rocío voló y voló hasta la Torre del Tiempo, donde las Estaciones tenían su morada. Se sorprendió mucho al ver a Verano sentado en el trono, ya que ahí sólo se sentaba la estación que regía en aquel momento. Rocío se acercó a Verano y respetuosamente le preguntó por qué las estaciones habían alterado su orden. Verano le contó lo que le sucedía a Invierno. Rocío comprendió al pobre Invierno y fue en su búsqueda. 

Cuando llegó se lo encontró leyendo un libro a la luz de una estrella. Estaba recostado en la Luna que en ese momento tenía forma de cuna.
Hola Invierno. – saludó Rocío.
Hola. – dijo Invierno fríamente. -¿Qué quieres?.

Entonces Rocío le contó todo lo que estaba sucediendo a causa de su ausencia. Pero al Invierno todo aquello no le importaba, necesitaba de algo que le alegrase la vida.

Entonces Rocío le contó todo lo que estaba sucediendo a causa de su ausencia. Pero al Invierno todo aquello no le importaba, necesitaba de algo que le alegrase la vida. 

Rocío pensó y pensó, hasta que por fin se le ocurrió:
-¡ La Navidad !- exclamó. – ¡Tú tienes la Navidad! –
– Sí y qué. – contestó Invierno indiferente.

Si contestas así es porque nunca has sentido la Navidad, es un tiempo de perdón y de fraternidad. De olvidar las diferencias con los demás. Es con mucho la época más alegre del año y tú dices que tu estación es aburrida, prueba a vivir la Navidad y verás.

El Invierno hizo caso del Hada del Agua. Volvió a la Torre del Tiempo y vivió en fraternidad con las otras Estaciones olvidando todas las envidias que había arrastrado toda su vida. Y ese año le gustó tanto la Navidad que a partir de entonces Invierno siempre espera con entusiasmo su turno para poder adornarlo todo con la nieve y disponerlo para la Navidad.

Fuente: www.arrakis.es

El ángel caído


11023.jpg

CUENTO DE NAVIDAD


Parece extraordinario toparse con un ángel de verdad, de esos con alas y todo. Y más aún si camino casa,lo ves allí malherido,tirado en la calle, donde aparentemente sólo los niños pueden verlo.

Uno de ellos decide ayudarlo,y al cargarlo en su hombro descubre que ¡los ángeles no pesan!¡

Y que pueden ser grandes compañeros de juegos! Una tarde hermosa como hecha de luz de oro ( como los soplos de sol de Su) el vuelo del ángel inunda el azul del firmamento, para cumplir el deseo de su gran    amigo de la tierra…Salvador… (mi mamá me cuenta tus cuentos)…gracias por tu rincón

lov_he364.gifQuerido Salvador exactamente como lo contaste lo transcribí…y te puse el dibujo de ángeles que elegiste, todo me pareció lleno de magia y dulzura.

Gracias bellísimo ángel en la tierra SALVADOR,

Gracias querida Mami Alex.

Susu