«Una de las cosas que me han enseñado los indígenas del mundo es que antes de llevar a cabo una ceremonia importante debemos conectarnos en amor con la Madre Tierra, después con el Padre Cielo, y a través de esa experiencia, finalmente con el Gran Espíritu o Dios.»
(Extraído de Viviendo con el Corazón, Drúnvalo Melchizedek)